UN GRAN TORERO, UNA GRAN GESTA, POR DEFENDER EL SITIO: ARTICULO DE OPINION.

Estimados lectores, la vida da muchas vueltas y el destino, las oportunidades y los retos, la mayoria de las veces, se presentan de improviso. Pero en este trajín, de subidas, bajadas, alegrias y sobresaltos, existe algo que engrandece a los hombres y mucho más a los que pueden ponerse delante de un toro; proponerse metas, cumplirlas y siempre mirar hacia arriba, poniendose retos cada vez más y más altos. Y uno de esos privilegiados, que nacieron para torear, Julian Lopez "El Juli", enfrentará, dentro de algunas horas, un compromiso que le llegó, subitamente, pero que el hombre lo tomó,como un reto más en su carrera, una encerrona no planeada, pero como una demostración, de como se defiende un sitio, sin tanto cuento mediático. Julian está inmerso en una temporada donde los grandes del escalafón, "arrean" en cualquier plaza; Ponce está imparable, Perera, se la juega tarde a tarde, Morante, más decidido, logra "parar de manos" a cualquiera, Manzanares, que ha logrado combinar el arte y la garra, ni se diga y pelear con el "torero mediatico", con el intelectual, con ese fantasma que aparece de vez en cuando y en ciertas plazas, no le ha puesto la cosas fáciles al madrileño. Pero la gesta de hoy en Bilbao, va a poner muchas cosas en su lugar. Julián, que siempre ha sido un torero de garra y con un gran orgullo, parece gritar a los cuatro vientos, que así es como se defiende un sitio; dando la cara en TODAS LAS PLAZAS IMPORTANTES, no como algún diestro, que quiere ir muy cómodo, sin dar la cara con el toro-toro, en las plazas de jerarquía, toreando con los alternantes que el quiere y siempre con sus "nuñez del cuvillo". Encerrarse con seis toros en Bilbao, no es lo mismo que matar el mismo número en Barcelona, no por demeritar la plaza, ni la gesta, pero el ruedo de Vista Alegre, representa la seriedad, el toro cuajado; y si matando dos se debe pasar miedo, no puedo imaginar lo que debe ser matar una corrida en solitario. "El Juli" tiene la técnica y la capacidad de sobra para salir avante del compromiso y de regalar a la afición, una tarde que podrá pasar a la historia; aunque en el fondo, sigo creyendo, que es una seria llamada de atención, para aquellos, que aunque agoten el papel en las plazas pequeñas y aunque les escriban libros, todavía, por lo menos esta temporada, no han dado la cara en las ferias importantes, como las reales figuras del toreo, si lo han hecho. Fernando Lahoz